Quiero que termine, pero no. Son más cambios todavía. Nada es lo mismo, ni siquiera es parecido, a lo que era hace un año. Supongo que lo único que sigue igual, soy yo. Pero ni estoy segura.
Las cosas cambiaron mucho en estos años, y últimamente, tengo bastantes encuentros con el pasado... pero en todos los casos comprobé que ha corrido mucha agua bajo el puente. Las cosas cambian, las personas también, pero hay cosas que siguen ahí. Algunas de ellas son las mismas por las que cambió todo, y otras son las que nos hacen querer volver.
2 comentarios:
Nada cambia...sólo se transforma.Desde cerca, todo parece mucho más difícil de lo que es.
A no desesperar...hay que dejar que las cosas fluyan...es lo más sano.
Besos.
Noe....desde ya que cuento con tu foto!...(tu presencia va a bajar en unas cuántas décadas el rango promedio del resto de los colegas blogueros! jajjaja)
Un abrazote!
P.d
y si paso a comentar por aquí, es porque quiero y disfruto haciéndolo! =)
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